Detras de la tormenta siempre se asoma el sol

martes, 31 de enero de 2012

14. Eh tu;

Eh tu, si, tú, ese que se hace llamar destino. Si lees esto que sepas que no podrás conmigo, soportaré esto y mucho más. Seguiré buscando. Da igual todas las piedras que me pongas en el camino, me da igual lo grandes que sean, el color, la forma y el porqué estén ahí, a modo de obstáculo. Ninguna de ellas logrará que deje de intentar ser feliz, que deje de luchar por todo eso que vale la pena. Y mientras haya una posibilidad, media posibilidad entre mil millones de alcanzar todo aquello que busco, no dudes que iré a por ello. Aunque gracias, mil gracias por meter a ella en mi vida, no sé como habría sido todo sin ella.

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